Os traigo, ahora, unas fotos del último viaje que hice en Semana Santa a Lisboa. La verdad es que la ciudad tiene muchísimas cosas que ver y merece la pena cogerse el coche y bajar unos días (sin perderse Cascais, Estoril, Sintra...).
En concreto, estas imágenes son del Monasterio de los Jerónimos de Belém, en las afueras de Lisboa, pero de visita obligada. Os cuento una anecdota-consejo por si vais: tanto en la Torre de Belém como en el Monasterio (están enfrente) te venden la entrada para los dos sitios. Id primero a la Torre y comprad allí las dos entradas, os comeréis unos 30-40 de cola, pero os evitaréis la hora y media del Monasterio (aunque seguro que cae un bufido de algún español que lleve parado media mañana jeje).
La fachada es una pasada y los jardines interiores también, pero me quedo con los techos y las zigzagueantes columnas que tiene. Te da la impresión de que estás metido en una de esas míticas construcciones que te imaginas leyendo "Los Pilares de la Tierra" o "La Catedral del Mar". Y como no, en blanco y negro para trasladaros a aquellas épocas.
En la primera foto, se puede observar el efecto que se consigue con el gran angular. El ángulo de visión es mucho mayor y te permite captar los dos pasillos. La segunda mete un poquillo de miedo, pero de eso se trata. No me quiero echar flores, pero me encanta la simetría de la imagen y las luces tan bien colocadas (pura potra). Para terminar, una imagen del techo para que os mareéis un poquillo y veáis como les debió de quedar las espalda a la gente que construyó esto...
1ª: modo prioridad de apertura, 1/15 segundos, f3.5, 10mm, ISO100.
2ª: modo prioridad de apertura, 1/10 segundos, f3.5, 13mm, ISO400.
3ª: modo prioridad de apertura, 1/10 segundos, f3.5, 10mm, ISO400.
